Mis viejos discos de vinilo
Al principio eran solo momentos puntuales. Me brotaba una especie de odio desde las entrañas y transformaba mi carácter. ¡Con todo lo que te he querido! Durante esos ataques espontáneos no podía ni verte, me molestaba tu simple presencia, aunque estuvieses en otra habitación de la casa. Ese carácter tuyo tan dócil, siempre intentando conciliar…